LA APERTURA
Todos estamos de acuerdo en que es necesario la apertura de la actividad económica, ahora nos falta ponernos de acuerdo bajo que protocolo se producirá la apertura.
Tenemos que
tener paciencia y seguir confiando en nuestras autoridades de salud, que según los
expertos internacionales ha manejado la pandemia del COVID 19 en forma
correcta, los sistemas de algunos países desarrollados han colapsado e incluso
la dinámica ciudad de new york, sin embargo, nuestro país se ha mantenido en
términos del sistema de salud relativamente estable, a pesar los estragos
causados por esta pandemia.
No debemos dañar lo que hemos hecho bien, se comprende la necesidad de que los negocios pequeños y medianos abran sus puertas al público, sin embargo, debemos ponderar el efecto sanitario que esto puede causar e impactar en forma negativa si nos desesperamos en una apertura no programada.
Nuestros empresarios comerciantes asociados en algunas organizaciones deben comprender que esta situación no es exclusiva de la República Dominicana y que tomar la decisión de abrir sus negocios sin la previa autorización puede generar una desobediencia civil a la autoridad legalmente constituida y esto en estos momentos no es necesario ni conveniente.
Todos debemos
poner nuestra cuota de sacrificio, porque abrir sin planificar podemos hacer colapsar
el sistema de salud y si esto sucede a quien se les venderá los bienes y
servicios que se ofertan, si se toma una decisión incorrecta, parte del sector
empresarial comercial debe ponderar estos elementos y que juntos debemos
contribuir para salir en forma ordenada y racional de esta pandemia.
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